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Mejor que nunca
La pasó mal. Quizá por eso cada logro, por pequeño que sea, lo disfruta más. Primero sufrió una lesión en la muñeca izquierda mientras entrenaba, que lo bajó del puesto 18ø al 254ø (así terminó el 2001). Luego tocó fondo en octubre de 2003 por la suspensión por doping en un control de Viña del Mar, en febrero, por consumo de clenbuterol (un broncodilatador). Y ahora resurge. Desde su regreso a las competencias a mediados del 2004, sólo se habla de los éxitos, de los ascensos, de las metas ya cumplidas. La Copa Petrobras, a fines del año pasado, le permitió pasar en un mes del 252ø al 133ø. Empujón suficiente para confiar en un gran 2005. Que ya empezó.
Mariano Puerta (26 años, sexto favorito) derrotó a Juan Mónaco por 6-4 y 6-1 en el ATP de Casablanca (416.443 dólares) en 1h18m y logró el tercer título en su carrera. "Mucha gente me dice que estoy mejor que en 2000 (un título y cinco finales). Por más que uno siente algo, que los demás lo digan no sólo le agrada, sino que confirma mis sensaciones", afirmó, eufórico.
El primer set se dividió en dos: hasta el séptimo game, ambos mantuvieron su saque, con puntos muy largos, pese al fuerte viento. En el octavo, quebró Mariano para 5-3, en el noveno, recuperó Pico y en el décimo repitió Puerta, con el que se llevó el parcial. En el segundo set, el dominio fue absoluto: quebró para 3-1 y sacó de partido al tandilense, que falló mucho (41 errores no forzados contra 30). "La final no fue fácil, me hubiera gustado ganar en Casablanca. Estoy frustrado", afirmó Pico. "Mi concentración hizo la diferencia. Mi mejor resistencia al clima también me ayudó", declaró el ganador.
En la 22 final entre argentinos, el cordobés ganó el 161ø título para el país. Los tres suyos, en nueve finales, fueron ante compatriotas: contra Squillari en Palermo 98 y contra Chela en México 2000. Este año perdió la única definición con otro argentino: en febrero, en Buenos Aires, ante Gastón Gaudio. En el 2005, lleva un récord de 21-8 (también fue semifinalista en Acapulco). En Casablanca ya habían ganado Guillermo Pérez Roldán (1992 y 93) y Guillermo Cañas (2001).
"Estoy contento por el triunfo, jugué bien, mantuve una regularidad y me llevo el título. Me hacía mucha falta para encarar con mayores posibilidades mi carrera", explicó Mariano, que vuelve a ser Top 50 y sueña con seguir ascendiendo hasta el Top 20, donde figuró hace cinco años. "Yo lo veía por televisión porque era muy chico. Pero seguro que es el jugador que era entonces. Tiene una gran solidez desde el fondo. Está jugando con muchísima confianza. Sobre polvo de ladrillo es uno de los más duros del mundo. Yo diría que es de los cinco mejores", reconoció Mónaco.
Con la confianza intacta, Puerta cumplió el primer objetivo que se propuso y va por más: hacer un buen papel en Roland Garros. Antes, en Montecarlo (ver Coria...), le toca Moyá, al que venció dos veces este año. Agradece a su señora y a todo su equipo. Y sí, se siente mejor que nunca.
Mejor que nunca
La pasó mal. Quizá por eso cada logro, por pequeño que sea, lo disfruta más. Primero sufrió una lesión en la muñeca izquierda mientras entrenaba, que lo bajó del puesto 18ø al 254ø (así terminó el 2001). Luego tocó fondo en octubre de 2003 por la suspensión por doping en un control de Viña del Mar, en febrero, por consumo de clenbuterol (un broncodilatador). Y ahora resurge. Desde su regreso a las competencias a mediados del 2004, sólo se habla de los éxitos, de los ascensos, de las metas ya cumplidas. La Copa Petrobras, a fines del año pasado, le permitió pasar en un mes del 252ø al 133ø. Empujón suficiente para confiar en un gran 2005. Que ya empezó.
Mariano Puerta (26 años, sexto favorito) derrotó a Juan Mónaco por 6-4 y 6-1 en el ATP de Casablanca (416.443 dólares) en 1h18m y logró el tercer título en su carrera. "Mucha gente me dice que estoy mejor que en 2000 (un título y cinco finales). Por más que uno siente algo, que los demás lo digan no sólo le agrada, sino que confirma mis sensaciones", afirmó, eufórico.
El primer set se dividió en dos: hasta el séptimo game, ambos mantuvieron su saque, con puntos muy largos, pese al fuerte viento. En el octavo, quebró Mariano para 5-3, en el noveno, recuperó Pico y en el décimo repitió Puerta, con el que se llevó el parcial. En el segundo set, el dominio fue absoluto: quebró para 3-1 y sacó de partido al tandilense, que falló mucho (41 errores no forzados contra 30). "La final no fue fácil, me hubiera gustado ganar en Casablanca. Estoy frustrado", afirmó Pico. "Mi concentración hizo la diferencia. Mi mejor resistencia al clima también me ayudó", declaró el ganador.
En la 22 final entre argentinos, el cordobés ganó el 161ø título para el país. Los tres suyos, en nueve finales, fueron ante compatriotas: contra Squillari en Palermo 98 y contra Chela en México 2000. Este año perdió la única definición con otro argentino: en febrero, en Buenos Aires, ante Gastón Gaudio. En el 2005, lleva un récord de 21-8 (también fue semifinalista en Acapulco). En Casablanca ya habían ganado Guillermo Pérez Roldán (1992 y 93) y Guillermo Cañas (2001).
"Estoy contento por el triunfo, jugué bien, mantuve una regularidad y me llevo el título. Me hacía mucha falta para encarar con mayores posibilidades mi carrera", explicó Mariano, que vuelve a ser Top 50 y sueña con seguir ascendiendo hasta el Top 20, donde figuró hace cinco años. "Yo lo veía por televisión porque era muy chico. Pero seguro que es el jugador que era entonces. Tiene una gran solidez desde el fondo. Está jugando con muchísima confianza. Sobre polvo de ladrillo es uno de los más duros del mundo. Yo diría que es de los cinco mejores", reconoció Mónaco.
Con la confianza intacta, Puerta cumplió el primer objetivo que se propuso y va por más: hacer un buen papel en Roland Garros. Antes, en Montecarlo (ver Coria...), le toca Moyá, al que venció dos veces este año. Agradece a su señora y a todo su equipo. Y sí, se siente mejor que nunca.